El maridaje de vinos con la comida es una práctica que se entiende como el proceso en el que conseguimos realzar y combinar los sabores de diferentes platos con diferentes clases de vino.
Esta combinación no se da de forma aleatoria sino que se lleva a cabo una cuidada selección del vino que mejor combina con las cualidades organolépticas de los alimentos a fin de potenciar sus sabores y matices.
Además de las sensaciones que nos producen los aromas y olores que definen el sabor y el equilibrio de un tipo específico de vino, al combinarlo con algún plato, se pueden apreciar varios estímulos que producen los componentes propios del vino.
Estos componentes serán los que determinen en gran medida la calidad del vino, para bien y para mal. De esta forma, los elementos que caracterizan el equilibrio de un buen vino son básicamente la estructura, el volumen, el aroma y la acidez.
Tipos de maridaje de vinos
Teniendo en cuenta algunas normas básicas de maridaje de vinos, podemos encontrar dos tipos, siempre intentando maximizar la experiencia gastronómica con un combinación única de sabores.
Podemos encontrar diferentes formas de maridaje de vinos con diferentes platos.
En primer lugar, el maridaje de vinos por similitud consiste en combinar sabores parecidos, sensaciones y aromas con el fin de encontrar la armonía entre los sabores y conseguir así realzar las cualidades del plato y de la bebida.
Maridar por similitud es la forma tradicional y la más usada en todo el mundo, en ella encontramos vinos tintos maridados con carnes rojas y vinos blancos con pescado. Este maridaje se extiende también a platos de pasta y algunas salsas.
Otro de los maridajes posibles, usado principalmente en cocina de vanguardia, tiene como objetivo encontrar el equilibrio entre aromas y sabores opuestos. Este tipo de maridaje de vinos permite a los expertos tomar un mayor riesgo y, además, conseguir un efecto sorprendente en el momento de la degustación.
Claves para un perfecto maridaje de vinos
Un maridaje perfecto te permitirá disfrutar de una variedad de sensaciones en el paladar. Sin embargo, es importante que tomemos en cuenta una serie de consejos para conseguir un buen maridaje y elegir los platos que mejor acompañan a cada vino.
En primer lugar, la elección del vino que acompaña al menú dependerá de cada plato, así que es crucial establecer un orden cuando seleccionemos los vinos que acompañarán a cada parte del menú.
Los entrantes suelen maridar bien con vinos rosados o blancos, mientras que los vinos jóvenes o crianzas tintos combinan bien con platos ligeros. Para los platos principales, en cambio, se recomienda optar por un reserva o por un gran reserva. Y finalmente, para los postres se recomienda normalmente acompañar el plato con un vino dulce.
Otra de las claves para un buen maridaje de vinos es asegurarnos de que la comida y la bebida tienen un peso similar, el cual viene dado por la cantidad de grasa, la intensidad del sabor o la facilidad de digestión que ambos elementos tienen.
Es muy importante que clasifiquemos los vinos basándonos en sus aromas para conseguir un maridaje perfecto. Esta clasificación va desde aromas primarios, secundarios y terciarios dependiendo del orden en que se aprecian.
Denominaciones de origen en Mallorca
Los amantes del vino pueden encontrar en Mallorca dos denominaciones de origen oficiales. La primera es la DO Binissalem, fundada en 1990 y con aproximadamente 140 hectáreas de viñedos.
La segunda DO oficial que encontramos es la de Pla i Llevant, fundada en 1999, la cual cuenta con más de 400 hectáreas de viñedos y que cubren gran parte del centro y este de la isla.
Consejos para un buen maridaje de vinos mallorquines
La variedad de uva autóctona de Mallorca es el Manto Negro, la base del vino tinto que proviene de la zona de Binissalem.
Además, estas variedades tienen su maridaje propio.
Maridaje de vinos tintos mallorquines
Los vinos tintos Manto Negro no son generalmente muy expresivos y alcanzan una excelente graduación. Estos vinos tienen aromas afrutados, florales y caramelizados y son de gran cuerpo aunque algo ligeros, equilibrados y suaves en el paladar.
Los entendidos pueden maridar los vinos tintos mallorquines con:
- Butifarra negra mallorquina rociada con aceite de oliva
- Alitas de pollo picantes
- Pasta con queso
Maridaje de vinos blancos mallorquines
En Es Guix, en cambio, se puede encontrar una amplia variedad de vinos blancos mallorquines. El Chardonnay Sa Cabana, de intenso color dorado, fina capa transparente y elegante lágrima, presenta el recuerdo de las flores silvestres, el campo y la montaña.
Este agradable sabor envuelve una deliciosa sensación tostada típica de esta variedad única. Además, una sensación balsámica surge para redondear y llenar nuestras papilas gustativas.
Los platos ideales para maridar con el blanco mallorquín son
- Cocina regional marinera
- Todo tipo de platos tradicionales que incluyan pescado
Maridaje de vinos rosados mallorquines
El vino rosado mallorquín es famoso y suele maridar con una amplia gama de platos, desde los ligeros hasta los grasos. Algunos de ellos son:
- Ensaladas
- Pescado a la plancha
- Carnes
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